Hay que tener en cuenta que el pie posee 26 huesos, 33 articulaciones y más de 100 tendones, músculos y ligamentos. Por ello puede sufrir una gran cantidad de patologías del pie. Traumatismos, el uso de calzado inadecuado o malformaciones pueden ser causa de trastornos en esta zona de la anatomía.
La aparición de dolor repentino en el pie, la inflamación de cualquiera de las articulaciones que lo conforman o cualquier cambio en esta zona, debe hacernos consultar al especialista. Cualquier afección en el pie puede comprometer su funcionalidad, por lo que se precisa una atención precoz.
Las patologías más frecuentes de los pies varían bastante entre sí y ofrecen distintos tipos de síntomas, al igual que diagnósticos y tratamientos. Entre las patologías que puede padecer el pie podemos encontrar estas trece:
Fascitis plantar
- Fascitis plantar. Es la inflamación del tejido grueso llamado fascia plantar en la planta inferior del pie. Esta fascia es la que conecta el calcáneo con los dedos y crea el arco inferior del pie que puede inflamarse, ser doloroso y dificultar la marcha.
- Se puede producir por varias causas como:
- el exceso de carga en el pie por andar demasiado largas distancias
- exceso de peso
- pies planos o cavos
- tendón de Aquiles tenso
- debilidad del músculo sóleo
- Se trata con fármacos, rehabilitación y plantillas ortopédicas
Espolón calcáneo
- Espolón calcáneo. Se trata de una neoformación ósea en la cara plantar del calcáneo donde se inserta la fascia plantar y provoca como consecuencia:
- dolor al apoyar el talón, sobre todo después del reposo
- En ocasiones genera fascitis plantar
Tendinitis
- Tendinitis. Es la inflamación del tendón de un músculo que se suele asociar a la inflamación de la vaina sinovial que lo rodea:
- Es frecuente la inflamación del tendón de Aquiles en
- deportistas
- personas con mucha actividad.
Metatarsalgia
- Metatarsalgia. Se caracteriza por dolor en la cara plantar de los metatarsianos, detrás de los dedos centrales producidos por cambios en la posición de los mismos. Esta patología se puede asociar a otras patologías como:
- juanetes
- dedos en garra
- subluxaciones articulares
Juanetes o hallux valgus
- Juanetes o hallux valgus. Uno de los problemas más frecuentes de los pies, el cual se trata de un:
- engrosamiento del dedo gordo
- también pueden aparecer en el dedo meñique
Dedos en garra o martillo
- Dedos en garra o martillo. Son los dedos que se han encogido produciendo una elevación o atrofia de los ligamentos o tendones, impidiendo que el dedo tenga su normal mecanismo de flexión y extensión.
- Suele producirse en el 2º y 3er dedo:
- ocasiona mucha molestia por la forma de garra que adoptan
Juanete de Sastre o quinto dedo varo
- Juanete de Sastre o quinto dedo varo. Consiste en la desviación del quinto dedo a la zona medial del pie y la formación del hueso en la quinta cabeza del metatarsiano.
- Provoca dolor en la cara lateral y plantar del pie.
Callosidades
- Callosidades. Es una acumulación de células muertas en los pies que se producen como mecanismo de defensa frente a una excesiva fricción o presión en la zona.
- Suelen ser consecuencia de:
- problemas de postura
- cuando el peso del cuerpo no se sostiene de forma balanceada.
Papiloma plantar o verruga u ojo de pescado
- Papiloma plantar o verruga u ojo de pescado. Es una tumoración benigna que aparece en la piel como consecuencia de una infección por el virus del papiloma humano.
- El contacto con el virus se produce en lugares en los que caminamos descalzos como:
Uña enterrada o uña encarnada
- Uña enterrada o uña encarnada. Se produce cuando uno de los laterales de la lámina periungueal se introduce dentro del tejido periungueal y se genera un enclavamiento de la uña que provoca:
- dolor
- inflamación
- infecciosa con pus
Pies planos
- Pies planos. Malformación ortopédica del pie caracterizada por la ausencia del arco longitudinal de la bóveda del pie. Son pies que se han aplanado porque han perdido el arco plantar del pie. Se producen porque los tejidos que sostienen las articulaciones del pie se debilitan. La mayoría de los pies planos no causan dolor. Se mejora a través de:
- Las plantillas ortopédicas
- el calzado ortopédico
- ejercicios como andar de puntillas
- coger objetos con los dedos de los pies
Pies cavos
- Pies cavos. Malformación ortopédica consistente en la elevación de la bóveda plantar del pie. Es frecuente en la población general aunque en sus formas leves. El 80% de los casos de pie cavo se halla asociado con una enfermedad neurológica con posibilidades de que se produzca una alteración neuromuscular.
- El trastorno se caracteriza por:
- dolor en la zona del arco y del talón
- en la zona del ante pié
- debajo de los dedos.
- Se asocia a una tensión y acortamiento de la musculatura plantar del pie y con el paso de los años se van haciendo más rígidos y dan lugar a la aparición de dolores como:
- metatarsalgias
- lumbalgias
- dedos en garra,
- dificultad para calzarse
- tendinitis.
- Se corrigen con plantillas y calzado ortopédico adecuados
Pies pronados y supinados
- Pies pronados y supinados. Para saber si tenemos pies pronados y supinados podemos proceder del siguiente modo:
- Colocamos los pies descalzos sobre una superficie plana
- desde arriba trazamos una línea imaginaria que se puede dividir en 2 partes:
- Si al apoyar el pie, este tiende a bascular hacia adentro y la rótula gira hacia adentro, estamos ante una postura de pie pronador
- Si el pie apoyado bascula hacia fuera y la rótula también tendremos una postura de pie supinador.
- Puede provocar dolores en los pies, las rótulas y la columna vertebral.
A estas trece patologías del pie se le pueden añadir otras diez que se componen del Pie Reumático, Enfermedad de Freiberg, Fracturas de Tobillo, Enfermedad de Haglund, Enfermedad de Sever, Deformidades Congénitas, Fracturas de calcáneo, Lesiones del cartílago astragalino, Artrosis de tobillo o Neuroma de Morton. Antes de terminar nos gustaría indicarles algunas recomendaciones que pensamos son de ayuda en el día a día.