Un tumor vertebral es un tipo de tumor de la espina dorsal que afecta a los huesos o vértebras de la columna vertebral. Estos tumores comienzan dentro de la médula espinal o en el recubrimiento de la médula espinal. Se conocen como tumores de la médula espinal. Los cuales están relacionados con la cirugía tumoral de las extremidades y el raquis.
Un tumor vertebral puede afectar la función neurológica del enfermo, al presionar la médula espinal o las raíces nerviosas cercanas. Debido a que estos crecen dentro del hueso, también pueden provocar dolor, vértebras fracturadas o columna inestable.
- IMPORTANTE – un tumor vertebral puede poner en riesgo la vida y provocar discapacidad permanente. Independientemente de que sea canceroso o no
Los tumores vertebrales advierten con distintos signos y síntomas, especialmente, a medida que crecen. Afectando la médula espinal, las raíces nerviosas, los vasos sanguíneos o los huesos de la columna vertebral.
- Dolor en el punto del tumor debido a su crecimiento
- Dolor de espalda, que a menudo se irradia a otras partes del cuerpo
- Empeoramiento nocturno del dolor de espalda
- Pérdida de sensibilidad o debilidad muscular, en los brazos o en las piernas
- Dificultad para caminar que, en ocasiones, provoca caídas
- Menos sensibilidad al frío, al calor y al dolor
- Deterioro de la función intestinal o de la vejiga
- Parálisis, que puede ser leve o grave y puede presentarse en distintas partes del cuerpo
Si tenéis algún síntoma de estos, lo más recomendable es acudir a nuestro médico de cabecera. En muchos casos los dolores de espalda no están relacionados con un tumor, pero debido a la gravedad de la patología. Como se suele decir, mejor prevenir que curar.
Lo que nos lleva a los factores de riesgo, que podemos evitar practicando las recomendaciones de nuestro doctor.
Los distintos tipos de tumores malignos tienen diferentes factores de riesgo. La exposición de la piel a la luz solar intensa, sin apropiada protección es un factor de riesgo para el cáncer de piel.
Fumar es un factor de riesgo alto, ya que puede afectar al pulmón, boca, laringe, vejiga, riñón, entre otros órganos. Por lo que es bastante lógico eliminar este hábito lo antes posible.
Con esto no queremos decir que por tener uno o incluso varios factores de riesgo usted padecerá la enfermedad. De hecho, la mayoría de las personas con cáncer de hueso no tienen ningún factor de riesgo aparente.
Enumerando los factores de riesgo más frecuentes, podemos empezar por:
- Trastornos genéticos (Condrosarcomas & Cordomas)
- Enfermedad de Paget (el 1% que padecen la enfermedad y cuando hay más de un hueso afectado)
- Radiación (radioterapia, posible causante de otro tumor)
- Trasplante de médula ósea (algunos casos de osteosarcoma)
- Lesiones (no hay datos para confirmar, que la rotura de un hueso, presente riesgo)
Una vez hayamos presentado alguno o varios de los síntomas descritos, el paso siguiente es el procedimiento a seguir.
La cirugía tumoral de las extremidades y del raquis, es el procedimiento que hace referencia a la intervención quirúrgica que busca la eliminación de tumores. Estos se encuentran en la zona de las extremidades y columna vertebral. Su reconstrucción si fuera necesario también entra dentro del procedimiento.
Este tipo de cirugía es extremadamente delicada. Ya que precisa del uso de distintas técnicas y de la experiencia y habilidad del cirujano.
Para los cirujanos, estas situaciones son un acto de equilibrismo. Si se corta demasiado, se corre el riesgo de extirpar tejidos sanos eliminando funciones importantes en el organismo. Si la extirpación es insuficiente, pueden quedar restos de células cancerosas.
A lo que se enfrenta un cirujano en un caso de cirugía tumoral y del raquis. Es el daño accidental de los nervios, durante la cirugía. Esto puede desencadenarse en que los pacientes pierdan movimiento o sensación. Cabe la posibilidad en algunos casos, de dañar la función sexual.
El proceso se inicia, si fuera necesario, con una biopsia y seguidamente el tratamiento quirúrgico, aunque son operaciones separadas. Por lo que es muy importante que el médico planifique ambos procedimientos juntos.
Idealmente, el mismo cirujano debe realizar la biopsia y la cirugía principal. ¿Por qué? Porque una biopsia que se toma de un lugar equivocado puede ocasionar problemas cuando el cirujano extraiga el cáncer.
Un claro caso de lo que podría suceder es que, una biopsia que no se realiza apropiadamente, abre las puertas a la imposibilidad de extraer el cáncer de una extremidad, sin tener que amputar.
Tras la finalización de la cirugía, un patólogo examinará el tejido extraído para ver si los márgenes (bordes externos) contienen células cancerosas. En este procedimiento se observa si hay células cancerosas en los bordes del tejido. Si es así se dice que los márgenes son positivos.
Los márgenes positivos pueden significar que quedaron rastros de cáncer. Por el contrario si no se observan células cancerígenas en los bordes del tejido. Se dice que los márgenes son negativos (limpios o libres).
Una escisión amplia con márgenes limpios minimiza el riesgo de que el cáncer vuelva a crecer en el lugar donde se originó. ¿Qué es una escisión amplia? Extraer parte del tejido normal (sano) que hay alrededor del tumor, esto ayuda a asegurar la extirpación total.
Todo lo presentado hasta el momento, tiene profesionales especialistas en esta área tan delicada, en CECOTEN. Nuestros cirujanos especialistas llevan muchos años tratando este tipo de patologías, siendo referentes a nivel regional y nacional. ¿Te lo contamos?
La cirugía tumoral de las extremidades y del raquis, precisa de material y herramientas de última generación, esto eleva el porcentaje de garantías de éxito en relación con la intervención.
Además, precisa de un personal facultativo debidamente especializado y formado para acometer este tipo de cirugías y en CECOTEN contamos con ambas cosas, así podemos dar las máximas garantías a nuestros pacientes.
En CECOTEN la cirugía tumoral de las extremidades y del raquis es tratada por especialistas reconocidos a nivel Canarias y España. Respaldados por las herramientas de última generación, que como hemos indicado anteriormente, son fundamentales.
Este equipo humano y material técnico han convertido a nuestro centro en uno de los referentes en las Islas. Ubicados en la isla de Tenerife ofrecemos un tratamiento personalizado y de garantías contrastadas.
A nuestras espaldas más de 15 años de trayectoria profesional en varias especialidades relacionadas con el diagnóstico, tratamiento y recuperación de las patologías del Aparato Locomotor, entre ellas la cirugía tumoral de las extremidades y del raquis.
Ante este tipo de enfermedades el trato humano aporta a la pronta recuperación de los pacientes. Nuestro personal no médico, está a vuestro servicio ayudando y apoyando en todo lo que este a su alcance y en conjunto con el equipo médico, CECOTEN sirve a sus pacientes con una sonrisa y alta profesionalidad.