Practicar deporte es necesario y saludable para las personas de todas las edades, ya sea como hobby o de forma profesional. Sin embargo, si no se hace de una forma correcta existen riesgos de sufrir lesiones. Los pesos excesivos y los movimientos inapropiados pueden ocasionar una hernia deportiva o hernia inguinal. Hoy en nuestro blog, te contamos como reconocer esta lesión y algunos consejos para prevenirla. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es una hernia deportiva?
Una hernia se presenta cuando una parte de un órgano interno sale a través de un área muscular que se encuentra débil. Esto es algo más común de lo que muchos piensan, y puede ocurrir tanto en hombres como en mujeres sin importar la edad que tengan, ya que incluso puede suceder en los niños.
Existen distintos tipos de hernias, como la hernia umbilical (en el área del ombligo), la hernia hiatal (en una abertura en el diafragma, músculo que divide el tórax y el abdomen) y la hernia de disco (en la columna vertebral). Sin embargo, la mayoría ocurren en el abdomen y, la más común, es justamente la hernia inguinal. Ésta se produce en la ingle, es decir, en el área en que coinciden la parte superior del muslo y la parte inferior del abdomen.
De entre los factores que pueden contribuir a que aparezca una hernia, además de la debilidad y distensión muscular, también se debe el levantar objetos pesados, hacer un esfuerzo muy grande o forzar o ejercitar en exceso ciertos músculos.
Todos los deportistas deben mantener ciertos cuidados y practicar ejercicio correctamente, pero quienes practican hockey sobre hielo, fútbol o tenis son más propensos de que les aparezca una hernia.
¿Y cómo se detecta una hernia?
Como ocurre con otras lesiones, el síntoma principal de la hernia es el dolor. Específicamente en la hernia inguinal, el dolor se siente en la zona baja del abdomen y en los genitales. Sin embargo, no siempre es fácil reconocerla y el dolor puede tardar en aparecer. A veces, incluso, pueden pasar semanas o meses hasta que aparece la molestia.
El médico especialista en deportes puede notar una tensión en la zona del músculo del deportista, pero sin llegar a detectar ningún bulto en los tejidos. Por eso, para poder detectar la hernia, el médico podría pedir al paciente realizar ciertos movimientos específicos para encontrar cuál es el que produce el dolor.
Si tienes una hernia, es posible que el dolor se resuelva descansado los músculos durante un tiempo y evitando realizar esfuerzos. Sin embargo, la hernia no desaparece por sí sola y la única forma de eliminarla por completo es mediante una cirugía, aunque no siempre es necesaria.
El problema con las hernias es que con el tiempo tienden a crecer y el riesgo es que se llegue a estrangular, lo que se conoce como una “hernia estrangulada”. Esto ocurre cuando las estructuras internas del abdomen, como los intestinos, se tuercen o quedan atrapados dentro de la hernia, impidiendo el paso de la sangre. Si esto ocurre, el paciente necesitará someterse a una cirugía de forma urgente para evitar una infección.
Cuidados para prevenir la formación de una hernia deportiva
- Mantener un peso saludable.
- Hacer ejercicios para reforzar los músculos abdominales con regularidad.
- Llevar una dieta rica en fibra e hidratarse bien para evitar el estreñimiento.
- Evitar levantar objetos pesados.
En el caso de las personas que entrenan y hacen deporte, es importante que se mantengan atentos a cualquier dolor que presente, que sigan las indicaciones de un especialista y que consulten con regularidad al médico para que pueda asesorarle sobre los cuidados específicos a seguir para que su deporte o rutina de ejercicios sea un aporte para su bienestar y salud.