Con la vuelta al cole, una de las mayores preocupaciones de los padres y los especialistas en salud es el impacto que el uso de mochilas cargadas puede tener en la espalda de los niños. En CECOTEN, centro de traumatología y cirugía ortopédica en Tenerife, nos preocupamos por la salud de los más pequeños, y por eso queremos ofrecerte información útil y práctica para evitar problemas de espalda relacionados con el uso incorrecto de las mochilas.
En este artículo, te contaremos por qué es importante prestar atención al peso y al uso correcto de las mochilas, cómo elegir la mochila adecuada y qué hacer si tu hijo empieza a mostrar señales de molestias en la espalda. Además, te explicaremos algunos ejercicios preventivos que pueden ser clave para mantener la salud de la columna vertebral durante todo el año escolar.
El problema de las mochilas cargadas en la Vuelta al Cole
Al comenzar el curso escolar, es habitual que los niños lleven mochilas llenas de libros, cuadernos, dispositivos electrónicos y material escolar. Aunque parece algo inocente, el peso excesivo y el mal uso de las mochilas pueden tener un impacto negativo en la salud musculoesquelética de los niños. Las mochilas sobrecargadas son uno de los factores más comunes asociados a los problemas de espalda en niños y adolescentes.
Según datos de organizaciones médicas, alrededor del 30% de los niños experimentan dolores de espalda relacionados con el uso de mochilas. En muchos casos, estos dolores pueden evolucionar a problemas más serios, como contracturas musculares, escoliosis o incluso hernias discales en edades tempranas.
¿Cómo afecta una mochila pesada a la espalda?
El uso incorrecto o excesivo de las mochilas genera una serie de efectos negativos en la postura y el crecimiento de los niños. Los más comunes son:
- Desalineación de la columna vertebral: Cuando un niño lleva una mochila demasiado pesada o mal ajustada, su cuerpo debe compensar inclinándose hacia adelante o hacia atrás, lo que puede alterar la alineación natural de la columna y provocar tensión en los músculos y ligamentos.
- Tensión en músculos y articulaciones: El peso excesivo sobre los hombros provoca una tensión muscular constante, especialmente en la zona del cuello, los hombros y la espalda baja. Esto puede resultar en contracturas musculares y rigidez.
- Compresión de los discos intervertebrales: La carga extra puede generar una presión indebida sobre los discos intervertebrales, afectando la capacidad de amortiguación de la columna. Con el tiempo, esto puede incrementar el riesgo de desarrollar problemas como hernias discales.
- Alteración del crecimiento: Durante la niñez y la adolescencia, la columna vertebral está en constante desarrollo. El uso prolongado de mochilas pesadas puede influir negativamente en este proceso, dando lugar a deformidades en la columna como escoliosis.
¿Cómo elegir la mochila adecuada?
Uno de los pasos clave para evitar lesiones de espalda en los niños es elegir una mochila que sea ergonómica y adecuada a su estatura y peso. No todas las mochilas son iguales, por lo que es importante prestar atención a ciertos aspectos:
1. Tamaño y ajuste de la mochila
La mochila debe estar adaptada a la altura del niño. Lo ideal es que la mochila no sea más ancha que los hombros del niño y que no sobrepase su cintura. La mochila debe descansar sobre la zona lumbar, no colgando sobre los glúteos.
2. Correas acolchadas y ajustables
Las correas deben ser anchas y acolchadas, lo que permite una distribución uniforme del peso. Además, es importante que las correas sean ajustables para que la mochila pueda adaptarse a los cambios de tamaño del niño a lo largo del año escolar.
3. Mochila con cinturón de ajuste
Un cinturón en la zona de la cintura o el pecho puede ser de gran ayuda para descargar parte del peso de los hombros y distribuirlo de manera más equilibrada en todo el cuerpo.
4. Mochilas con compartimentos
El uso de mochilas con varios compartimentos permite organizar mejor los materiales y distribuir el peso de forma más uniforme. Los objetos más pesados deben colocarse cerca de la espalda, mientras que los más ligeros pueden ir en la parte frontal de la mochila.
5. Peso máximo recomendado
Un niño no debería cargar más del 10-15% de su peso corporal en la mochila. Por ejemplo, si un niño pesa 30 kg, su mochila no debería exceder los 3-4,5 kg. Mantenerse dentro de estos límites es clave para evitar sobrecargas.
La importancia de una buena postura
La forma en que los niños llevan la mochila también es crucial. Aquí algunos consejos para asegurarse de que tu hijo la use correctamente:
- Usar ambas correas: Nunca permitas que tu hijo lleve la mochila colgando de un solo hombro. Esto provoca un desbalance y fuerza a la columna a compensar el peso de forma incorrecta.
- Ajustar las correas correctamente: La mochila debe estar bien ajustada para que se mantenga lo más cerca posible del cuerpo. Una mochila que cuelga baja sobre la espalda aumenta la presión en la parte baja de la columna.
- Levantar la mochila correctamente: Enséñale a tu hijo a levantar la mochila doblando las rodillas en lugar de inclinarse hacia adelante. De esta manera, evitará sobrecargar la espalda desde el primer momento.
Señales de alarma: ¿Cuándo consultar a un especialista?
A pesar de todos los cuidados, algunos niños pueden experimentar dolores de espalda. Es importante saber reconocer las señales de alarma que pueden indicar un problema más grave:
- Dolor constante: Si tu hijo se queja de dolor en la espalda de manera recurrente, especialmente después de cargar la mochila.
- Cambio en la postura: Si notas que tu hijo comienza a caminar encorvado o con los hombros caídos.
- Hormigueo o entumecimiento: Estos síntomas pueden indicar una compresión nerviosa y deben ser evaluados por un especialista.
En CECOTEN, nuestro equipo de especialistas en traumatología y ortopedia infantil está capacitado para evaluar y tratar problemas de espalda en niños. Si tu hijo presenta alguna de estas señales, te recomendamos una consulta con uno de nuestros expertos para prevenir complicaciones a largo plazo.